Érase una vez un elefante que trabajaba en el circo haciendo equilibrios sobre una cuerda, un día cansado del espectáculo decidió abandonarlo y probar con otro oficio, ya que había parecido una mona que le hacía sombra a su función. Probó dedicarse al canto flamenco pero no le funcionó, entonces, se inscribió en un curso de Teleasistencia y nada mas llegar dio con su trompa en el techo y se sintió muy avergonzado delante de sus 9 compañeros de clase, sin darle mas importancia a este hecho comenzaron a conocerse a través de una dinámica que propuesto la docente, esta dinámica consistía en ver quien arrojaba más lejos unas piedras, una vez finalizada dicha actividad el elefante se dio cuenta de que tenía capacidades suficientes para hacer cosas nuevas y sentirse así realizado.
Este suceso provocó que se estableciesen vínculos amistosos fuertes entre el grupo.
¡Colorin colorado este cuento se ha acabado!
GRUPO 2
Bajo este techo todos hemos sentido a veces sombras a
nuestro alrededor. También piedras en el camino que todavía no han acabado. Estamos
gente de toda, gente a las que nos sobra cuerda al hablar y gente a la que se
la tendríamos que prestar, pero nos queremos todos por igual. A veces pensamos
en musarañas, elefantes y otras en nuestro propio canto. Pero en el fondo somos
9+4 un total de 13. Un equipo que sin querer nos hemos unido.
GRUPO 3
GRUPO 4
Bajo este techo hemos hecho una amistad mas grande que un elefante, ya que nos ha dado tiempo desde las 3 hasta las 9 de la noche todos los días. Cuando hacia sol buscábamos la sombra, hemos hablado, nos hemos divertido y con ello nos podemos dar con un canto en los dientes. Nunca nos hemos tirado piedras, siempre nos hemos echado una cuerda. Pero sin este curso no podríamos haber conocido a esta maravillosa gente.
GRUPO 3
Todos los días bajo el techo de esta habitación, se reúnen de
tres a nueve, catorce personas para hacer el curso de teleasistencia, sin darnos cuenta llevamos la mitad del curso.
Nos podemos dar con un canto en los dientes de tener esta
excelente profesora. Algunas veces somos más pesados que elefantes, pero parece
que estamos unidos por la misma cuerda porque nos llevamos muy bien todos. Además
de aprender nos lo pasamos muy bien, con las dinámicas que hacemos y con los exámenes
también. Aunque con piedras hemos
tropezado nos hemos sabido levantar y como buenas sombras somos siempre vamos detrás,
Paco y Lorena los que más, ha sido un placer compañeros y en la cena nos
veremos.
GRUPO 4
Bajo este techo hemos hecho una amistad mas grande que un elefante, ya que nos ha dado tiempo desde las 3 hasta las 9 de la noche todos los días. Cuando hacia sol buscábamos la sombra, hemos hablado, nos hemos divertido y con ello nos podemos dar con un canto en los dientes. Nunca nos hemos tirado piedras, siempre nos hemos echado una cuerda. Pero sin este curso no podríamos haber conocido a esta maravillosa gente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario